Al igual que cuando amanecemos el cuerpo y la mente necesitan unos segundos para despertar, o como cuando estudias o aprendes un idioma, necesitamos semanas o incluso meses para entender o poder asimilar ciertos temas o estructuras gramaticales, en la rehabilitación como en cualquier otro sistema relacionada con el movimiento, el raciocinio o que posee su propio lenguaje o técnica, es necesario un tiempo para navegar y poder familiarizarte con esa nueva manera de proceder y poder cambiar o procesar ciertos patrones mentales y físicos.
Hoy en día estamos muy acostumbrados a la tecnología e inmediatez de las cosas. A conseguir cosas que antiguamente requerían meses en pocas horas (visitar otro continente, recibir noticias de alguien, hacer una compra…) Con un solo clic compras en internet, borras una carpeta entera de fotos… pero la mente y el cuerpo afortunadamente no funcionan así. Si te propusieras trabajar la elasticidad o recuperarte de una lesión no será posible que lo consigas de manera instantánea o de un día para otro, incluso habrá días en los que creerás haber retrocedido ya que te sentirás más rígido o reaparecerá un dolor antiguo, pudiendo que esto incluso no sea del todo cierto ya que muchas veces podrá ser nuestra percepción y autoexigencia la que nos genere ciertas sensaciones.
Y es que tanto los sentimientos, como las emociones… necesitan un tiempo para madurar y/o mutar, siendo éste mayor o menor en función del caso, lo cierto es que no hay un tiempo estipulado y por supuesto no es de un día para otro.
Habría que tener en cuenta además, que en la misma parte del cerebro dónde se gestionan las emociones, se gestiona el aprendizaje, de ahí que no tenga sentido separar la mente del cuerpo o el tener o tratar de analizar el uno sin el otro. Físicamente de hecho hay una conexión directa entre ellos, están conectados mediante el líquido cefalorraquídeo, venas, huesos…
Y tener esto en cuenta es importante ya que ser disciplinado y persistente en el trabajo es fundamental para conseguir buenos resultados para sentir avances a la larga y mejorar en lo que te propongas, e igual de importante es tener una actitud positiva a poder ser cada día pudiendo relativizar en ciertos momentos del proceso para tener la capacidad y la fuerza para seguir y no querer tirar la toalla antes de tiempo.
Leave a reply